Lámpara

Es muy importante que la iluminación del espacio sea correcta; esto ayudará a las personas con dificultades visuales y auditivas, al facilitar que éstas últimas puedan leer mejor los labios.

Es recomendable tener reguladores de intensidad para ajustar el grado de luminosidad.

Ventilador

Aparatos como ventiladores, proyectores, etc., serán lo más silenciosos posible.

Ventana

Siempre que sea posible, se utilizará luz natural.

Es necesario usar cortinas, persianas y similares para eliminar los reflejos o sombras.

Megafonía

Es importante cuidar la acústica del espacio, sobre todo en consideración con las personas con discapacidad auditiva.

Pared del aula

Es recomendable que las paredes estén recubiertas de algún material aislante para evitar la reverberación del ruido, las interferencias o las vibraciones.

Silla

Las sillas serán de 44 cm. de altura, como mínimo: así, el alumnado con movilidad reducida podrá sentarse y levantarse cómodamente.

Pupitre más cercano a la pizarra

El alumnado con discapacidad auditiva se ubicará en las primeras filas: así, podrá mantener contacto visual y facilitará la lectura de labios.

Si la colocación de las mesas fuese en forma de “U”, el alumno o alumna con discapacidad auditiva estaría lo más cerca posible del personal docente.

Armario

Los armarios deben estar pegados a la pared y llegar hasta el suelo.

Así, las personas con discapacidad visual usuarias de bastón los pueden detectar de forma rápida.

Pupitre

Es recomendable que las patas de las mesas y sillas tengan protecciones de fieltro.

Suelo del aula

La distribución espacial debe fomentar siempre la comunicación y movimientos: por ello, debe haber un espacio mínimo entre elementos.